A estas alturas probablemente hayas oído hablar de ella: la Dieta HCG, una dieta extrema que implica inyecciones de HCG (gonadotropina coriónica humana). HCG es la hormona que producen las mujeres cuando están embarazadas. Anteriormente, la Dieta HCG se definía por una dieta de 500 calorías combinada con inyecciones diarias de HCG.
Esta dieta está asociada con una pérdida de peso dramática, hasta una libra por día. Pero el problema, hasta ahora, era que ningún médico podía explicar cómo funcionaba, y los críticos afirmaban que las restricciones calóricas son las responsables de la pérdida de peso y no la hormona HCG. Los críticos de la dieta también han sostenido que no se puede mantener el peso perdido. La Dieta HCG también ha tenido algunas reglas extrañas. Por ejemplo, exigía el consumo de una sola verdura por comida, prohibía el uso de aceites, lociones corporales y productos de higiene, y limitaba el uso de la hormona HCG a ciclos impares de 23 y 46 días. La Dieta tampoco permitía el ejercicio. Además, no había directrices publicadas sobre cómo dosificar la hormona HCG; como resultado, la mayoría de los proveedores de esta dieta generalmente usan dosis aleatorias de la hormona recetada. Esto se llamó el Protocolo Simeons y, en mi opinión, estaba mal.
Después de años de investigación y tratamiento de miles de pacientes, estoy dejando las cosas claras. El Protocolo Simeons ya no debería estar en práctica por ningún médico. Mi protocolo está respaldado por numerosos estudios y ensayos clínicos, el último de los cuales se presentó a los médicos especialistas en pérdida de peso en la reunión de octubre de 2012 de la Sociedad Estadounidense de Médicos Bariátricos y se puede leer en DrEmmasDiet.com. Mi método de dosificación es personalizado, con dosis mucho más altas que las publicadas anteriormente, y he creado pautas específicas para pacientes según la edad y el sexo. Ofrezco dietas que van desde 500-1500 calorías, y la dieta debe elegirse en función del paciente y su historial. También animo a los tipos adecuados de ejercicio.
Entonces, la pregunta más apremiante es: ¿Funcionan las inyecciones de HCG para perder peso? Mi respuesta es sí, absolutamente. La pregunta más complicada es: ¿Cómo funciona la HCG para bajar de peso?
Aquí está mi explicación, basada en mi investigación. ¡Recuerde, HCG no lo hace perder peso, la dieta lo hace perder peso! Sin embargo, ¡las inyecciones de HCG cambian la forma en que pierdes peso!
Según el informe del paciente, la HCG reduce la sensación de hambre. Esto les permite comer muy poco cómodamente. ¿Por qué? Se cree que la presencia de HCG en el torrente sanguíneo quita el apetito. En las mujeres embarazadas, la HCG a menudo provoca náuseas en las primeras etapas del embarazo.
HCG es una pro-hormona que ayuda al cuerpo a producir más hormonas. Dado que la deficiencia o el desequilibrio hormonal suele ser parte del motivo del aumento de peso, ya sea la tiroides o la menopausia (o andropausia), esta hormona ofrece ayuda.
Se ha demostrado que solo las inyecciones de HCG elevan los niveles sanguíneos de HCG, por lo que es la única forma aceptable de tomar HCG en este momento. Cualquier otra forma de tomar HCG, como gotas, píldoras o aerosoles, probablemente se disuelva antes de llegar a la sangre y no elevan los niveles sanguíneos; esto sería como no tomar nada en absoluto. Una inyección es el único método probado de tomar HCG en este momento. Las inyecciones solo deben administrarse con receta médica y bajo supervisión médica.
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